Introducción
La Atención Primaria (AP) constituye un lugar privilegiado para la investigación en salud, que permite desarrollar estudios de base poblacional, estudios de las patologías más prevalentes y el seguimiento de grupos específicos de población, especialmente en fases precoces de enfermedad. La longitudinalidad y el componente comunitario son características que facilitan el enfoque de promoción de la salud y prevención de la enfermedad, ya sea primaria, secundaria o terciaria1,2.
Y por todo ello, la investigación, como competencia de la Medicina Familiar y Comunitaria3, es también una de las líneas estratégicas de nuestra sociedad científica, conscientes de que la investigación de calidad es un instrumento fundamental para generar conocimiento y contribuir al progreso del sistema sanitario.
Actualmente en España la Medicina de Familia es una especialidad con un elevado número de mujeres. Esto se refleja en nuestra sociedad científica, la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria (semFYC), que destaca como la sociedad científica más feminizada de nuestro ámbito, con un 70% de socias, y un aumento progresivo de esta proporción a lo largo de las últimas décadas.
Estos datos están en consonancia con el hecho de que la feminización de la carrera de Medicina ha sido récord para la titulación en los últimos 5 años. Según las estadísticas publicadas por el Ministerio de Universidades, el porcentaje de mujeres ha aumentado de media en 2,5 puntos hasta alcanzar el 70% de tasa de mujeres, y con un descenso progresivo del número de hombres que acceden al grado de Medicina situándose actualmente en una tasa del 30%4.
Ante este dato de feminización de los estudiantes de Medicina, la realidad actual de la profesión en España se traduce en un mayor número de mujeres colegiadas que hombres, aunque la representatividad de las mujeres al frente de colegios médicos y sociedades científicas no se corresponde con dicha realidad5,6. En la Federación de Asociaciones Científico Médicas Españolas (FACME), de las 46 sociedades científicas asociadas, 38 de ellas están presididas por hombres y tan solo 7 (15%) cuentan con una presidencia a cargo de una mujer, aunque actualmente la presidencia de FACME la ostenta una mujer7-10. Y en el ámbito académico, el techo de cristal en las facultades de Medicina públicas se constata con tan solo 4 mujeres decanas (10%) frente a 34 hombres6.
La semFYC, nuestra sociedad científica, está constituida por más de 22.000 socios y socias especialistas en Medicina Familiar y Comunitaria que desarrollan su actividad en España, y actualmente cuenta con una Junta Directiva con un índice de feminización mayor de 1. La distribución de los socios y socias según el género depende de la edad: mientras que en el grupo de los profesionales séniores (mayores de 50 años) existe paridad con un 45% de hombres y un 55% de mujeres, en los rangos de edad más jóvenes un 25% corresponde a hombres frente a un 75% de mujeres.
Somos una sociedad científica que apuesta por la investigación, por la transferencia del conocimiento, por hacer llegar los resultados en salud y la innovación en la práctica clínica a la ciudadanía, a los pacientes. Se han realizado estudios sobre la representación de la mujer en la producción científica publicada10,11, sin embargo, no son frecuentes los realizados sobre la autoría femenina en las novedades de investigación presentadas en eventos científicos. Por tanto, y con visión de perspectiva de género, nos planteamos conocer el grado de feminización de la autoría de los estudios y proyectos de investigación presentados en las reuniones científicas nacionales de la semFYC.
Material y métodos
Se realizó un estudio descriptivo transversal con revisión de dos bases de datos de nuestra sociedad científica. La fuente de información fue la base de comunicaciones científicas de investigación de los congresos de la semFYC, y la base de proyectos de investigación que optan a las becas de la semFYC para tesis doctorales, Isabel Fernández.
El marco temporal para el análisis ha sido el periodo 2007-2021. En ese periodo hemos estudiado un total de 6.057 comunicaciones de resultados de investigación cuantitativa, cualitativa y proyectos de investigación, y 273 proyectos de tesis doctorales.
En el último período, desde 2018 se incorporaron los resultados de investigación obtenidos de los trabajos de fin de residencia de los residentes de Medicina Familiar y Comunitaria, realizados en el cuarto o tercer año de su residencia (R4, R3), así como de enfermeras internas residentes (EIR) de las unidades multiprofesionales.
Las variables recogidas fueron: género, C. A., congreso nacional de la semFYC, año de presentación de la comunicación, áreas temáticas de interés y tipo de comunicación (estudios con resultados, proyectos, proyectos de tesis doctorales y estudios de fin de residencia). Para los proyectos de tesis doctorales, también se incluyó la universidad a la que está vinculada dicha tesis.
Se ha realizado un análisis descriptivo de las variables mediante proporciones, medidas de tendencia central y medidas de dispersión y sus correspondientes intervalos de confianza al 95%. También se estudió la asociación entre variables mediante pruebas de independencia para comparar proporciones (ji al cuadrado) y pruebas de comparación de medias en grupos independientes (prueba t de Student, y U de Mann-Whitney). Los análisis se realizaron mediante el Sistema SPSS v 25.0.
Resultados
Del total de las 6.057 comunicaciones de resultados de investigación cuantitativa, cualitativa y proyectos de investigación, 4.034 comunicaciones (66,7%; IC 95%: 65,5-67,8) fueron presentadas por mujeres como autora principal, frente a 2.023 comunicaciones (33,3%; IC 95%: 32,1-34,5) con autoría masculina.
De este total, 96 comunicaciones corresponden a resultados de investigación obtenidos de los trabajos de fin de residencia de los y las residentes de Medicina Familiar y Comunitaria, con autoría femenina en 70 de ellas (73%), y masculina en 26 (27%).
En la tabla 1 se muestra la autoría de las comunicaciones en función del género, con un claro predominio del porcentaje de mujeres y con tendencia a aumentar en el último decenio. La razón de feminidad osciló entre 1,25 del congreso del año 2007 y 2,90 del celebrado en 2020. Al agrupar las comunicaciones en tres quinquenios (2007-2011, 2012-2016 y 2017-2021), se observó un incremento significativo del porcentaje de autoría de las comunicaciones a favor de las mujeres desde el primer quinquenio hasta el más reciente, con un 64,1%, 66,4% y 68,7% en mujeres frente a un 35,9%, 33,6% y 31,3% en hombres (p = 0,038). En la figura 1, que muestra el porcentaje de comunicaciones por años, se puede visualizar también esa tendencia a lo largo del tiempo.
Un dato que destacar es la paridad en el cargo de la presidencia del comité científico de los congresos, presentando un índice de feminización igual a 1, que se mantiene desde el año 2007 y con una proporción del 53,4% de mujeres (8 presidentas) frente al 46,6% de hombres (7 presidentes). Al valorar la posible influencia del género de la persona que preside el comité científico y la razón de feminización de las comunicaciones de investigación, no se observaron diferencias estadísticamente significativas (p = 0,67).
En la figura 2 se presentan los datos sobre la procedencia de las comunicaciones según CC. AA., que reflejan que Cataluña y Andalucía son las CC. AA. que, en global, más comunicaciones de investigación han presentado a lo largo de todo el periodo estudiado, con un 40% (IC 95%: 39-41) y un 18% (IC 95%: 17-19), respectivamente, seguidas de la Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana, con un 8% (IC 95%: 7,3-8,7), y un 6% (IC 95%: 5,4-6,6), respectivamente. El análisis de la procedencia de las comunicaciones con autoría únicamente femenina muestra el mismo predominio en el origen de los estudios, con Cataluña (42%; IC 95%: 40,5-43,5) y Andalucía (19%; IC 95%: 17,8-20,2) como las más representadas, seguidas de la Comunidad de Madrid (7%; IC 95%: 6,2-7,8), la Comunidad Valenciana (5%; IC 95% 4,3-5,7) y la Comunidad de Murcia (5%; IC 95%: 4,3-5,7) (figura 3).
Respecto a la ratio de mujeres frente a los hombres por cada C. A., es Aragón la C. A. con la mayor proporción de estudios de investigación presentados por mujeres respecto a hombres (0,72; 96/133), seguida de Cataluña (0,69; 96/133), Andalucía (0,69, 1657/2396), Baleares (0,69; 86/124), y Canarias (0,69; 81/118) (figura 4).
En la tabla 2 se muestra la distribución de las áreas temáticas más frecuentes de las comunicaciones de investigación en función del género. En global, las áreas estudiadas con mayor frecuencia fueron las enfermedades cardiovasculares (9,8%), la gestión sanitaria (7,9%), la diabetes mellitus (7,1%), la atención al mayor (5,8%) y las enfermedades infecciosas (5,1%). Se observaron diferencias estadísticamente significativas entre ambos sexos respecto a los temas de las comunicaciones en diabetes (p = 0,03), gestión (p = 0,039), atención a la mujer (p = 0,031), siendo más frecuentes en autoras femeninas, mientras que la autoría fue más frecuente en hombres en el tema de nuevas tecnologías (p < 0,001).
El análisis de los 273 proyectos presentados para las convocatorias de las becas de investigación para el desarrollo de tesis doctorales permite conocer la autoría de las personas candidatas a dichas ayudas, con un índice de feminización mayor de 1, con 197 mujeres (72%, IC 95%: 66,7-77,7) frente a 76 hombres (28%, IC 95%: 21,7-34,5), observando una tendencia estable a lo largo del tiempo y de todas las diferentes convocatorias (figura 5). Respecto a la procedencia de estos proyectos, en la tabla 3 se observa que las CC. AA. con más solicitudes fueron Cataluña (26,0%) y Andalucía (20,5%), seguidas de la Comunidad de Madrid (11,7%), Castilla y León (9,2%), Galicia (7,0%) y la Comunidad Valenciana (6,6%).
Los proyectos de investigación están vinculados a casi todas las diferentes universidades del ámbito nacional, siendo las universidades más representadas la Universidad Autónoma de Barcelona (13,6%), seguida de la Universidad de Zaragoza (7,0%), la Universidad de Valladolid (5,9%), la Universidad de Sevilla (5,5%), la Universidad de Córdoba (5,1%), la Universidad Rovira i Virgili de Tarragona (4,8%) y la Universidad de Santiago de Compostela (4,8%). El grado de feminización de los proyectos concuerda también con las CC. AA. y universidades que más proyectos presentan, correspondiendo la autoría femenina en el 23,4% a Cataluña, el 18,7% a Andalucía, el 10% a la Comunidad de Madrid, el 9,1% a la Aragón, el 7,7% a Castilla y León, y el 7,1% a Galicia.
Las CC. AA. con ratio de feminización más elevada, son Aragón (100%), la Comunidad de Murcia (82,4%, 14/17), seguidas de Galicia (79%, 15/19), la Comunidad Valenciana (77,7%, 14/18). Respecto a las universidades, las de mayor porcentaje de feminización fueron la Universidad de Zaragoza (100%, 19/19), la Universidad de Valladolid (48%, 12/25) y la Universidad de Santiago de Compostela (52%, 10/19).
Discusión
Este trabajo, de índole exploratoria, constituye una primera aproximación al estado de la investigación en Medicina de Familia realizada y liderada por mujeres en el seno de nuestra sociedad científica. El análisis de los datos refleja un aumento progresivo de las autorías femeninas, acorde con la progresiva feminización de la medicina y de la especialidad13,14. A lo largo de los últimos 15 años la tendencia ha ido cambiando, con un claro aumento del índice de feminización, siendo superior a 2,5 en el último quinquenio.
Es importante hacer hincapié y remarcar que la Medicina de Familia es un área de conocimiento y que los congresos científicos son un entorno idóneo para que los residentes de la especialidad puedan desarrollar sus competencias en investigación15. La incorporación de un espacio específico para los trabajos de fin de residencia, que facilita la visibilización de sus estudios de investigación, ha sido bien acogida con la recepción de un elevado número de proyectos (96 proyectos en 3 años).
La AP, la actividad asistencial de la Medicina de Familia, es un entorno favorable para que la investigación ayude a generar conocimiento e innovación, aunque se necesitan entornos y estructuras que lo favorezcan. En nuestro análisis la procedencia de las autoras se mantiene a lo largo del tiempo, siendo Cataluña la C. A. con más presencia, tanto a nivel global (40%), como en autorías femeninas (42%), seguida de Andalucía, la Comunidad de Madrid y la Comunidad Valenciana. Estos datos reflejan la necesidad de disponer de instituciones y fundaciones de investigación, así como de unidades docentes que faciliten la investigación. Disponer de fundaciones, como la Fundació d’Investigació en Atención Primària Jordi Gol i Gurina, en Cataluña, con su instituto de investigación en AP (IDIAP), con una larga trayectoria en apoyo y promoción de la investigación en nuestro ámbito (en este año 2022 celebran los 25 años) y que se refleja con una elevada producción científica de las profesionales de AP. Hay que destacar otras instituciones de investigación en AP más recientes, como son la Fundación de investigación e innovación en Atención Primaria (FIIBAP) en Madrid, o entornos de características específicas en Andalucía, o Valencia, entre otras, y que también se refleja en las aportaciones a los congresos. Es importante destacar que la C. A. con mayor porcentaje de autoría femenina es la comunidad de Aragón, en la que existe un grupo de investigación dirigido por mujeres, y que se refleja en su producción científica.
Los resultados de nuestro estudio ponen de manifiesto la necesidad de que las administraciones apuesten por consolidar estructuras organizativas de investigación, con dotación económica y personal de apoyo, que ayuden a favorecer la conciliación laboral-familiar, a compatibilizar la dedicación específica en investigación con la labor clínica asistencia habitual, permitiendo consolidar proyectos, obtener resultados de investigación de calidad y una producción científica de valor16,17.
Las áreas temáticas de los congresos, y a las que se vinculan los estudios de investigación presentados, reflejan el amplio abanico de actividades que se pueden desarrollar en el ámbito de la Medicina de Familia. En este estudio, las temáticas con mayor frecuencia abordadas por parte de la autoría femenina están centradas en el abordaje de la cronicidad y la atención a los pacientes con patologías crónicas, la atención a las personas mayores, y los procesos clínicos más prevalentes en nuestra práctica clínica, como son las enfermedades cardiovasculares, la diabetes, y las enfermedades infecciosas. También destaca la gestión clínica entre la temática más tratada, demostrando el interés no solo por las áreas de asistencia clínica, sino por los temas organizativos y de gestión. Y en esta misma línea cabe resaltar que, en este análisis, la temática de las nuevas tecnologías está más vinculada a la autoría masculina.
A pesar de que la Medicina de Familia es un área de conocimiento, sigue existiendo una laguna de reconocimiento por parte de la formación universitaria en España. La Medicina Familiar y Comunitaria está reconocida como especialidad médica hace más de 40 años, y cuenta con un área de práctica clínica y de investigación bien definida y diferente al resto de especialidades18,19. Nuestra sociedad científica realiza múltiples actividades que pretenden reducir las distancias entre la universidad y la Medicina de Familia, resaltando su implicación en la incentivación de la investigación en nuestra especialidad; así, desde hace años convoca ayudas para la realización de tesis doctorales. Nuestros datos muestran que existe un elevado número de especialistas en Medicina de Familia que participan en estas convocatorias. La procedencia de las universidades en las que se presentan proyectos de tesis doctorales vinculadas a la AP está alineada con los datos obtenidos de los estudios de investigación, siendo Cataluña (23,9%), la C. A. con mayor participación en dichas convocatorias seguida de Andalucía, Madrid, Castilla y León, Aragón y Galicia.
Las universidades que aportan el mayor porcentaje de proyectos de tesis doctorales de autoría femenina corresponden nuevamente a Aragón, a la universidad de Zaragoza, seguida de la universidad de Valladolid y la de Santiago de Compostela. En el ámbito de Aragón y Valladolid se encuentran profesionales de reconocido prestigio en nuestra sociedad científica, médicas de familia carismáticas como son Rosa Magallón (primera mujer como titular universitaria en Medicina de Familia) y Verónica Casado (con el reconocido título —médica cinco estrellas— por WONCA). El incansable trabajo en estos entornos académicos por parte de ellas y de más médicas de familia muy probablemente favorece este resultado positivo de la autoría femenina.
La Medicina de Familia está feminizada, y la investigación presentada en los congresos de la semFYC, también. Ahora queda seguir avanzando en este camino y que esta investigación inicial que se presenta en los congresos se traslade a las publicaciones, a las redes de investigación, a la universidad10,19. La investigación, además de tener un entorno de difusión como son los congresos, ha de poder reflejarse en las publicaciones de revistas científicas, que avalen el valor de dicha investigación. Las publicaciones en revistas biomédicas de la especialidad ponen de relieve que la autoría femenina de originales de investigación se ha mantenido estable en los últimos años, aunque con los datos presentados de producción científica en congresos hubiera sido deseable observar un aumento en paralelo en las publicaciones11,12,20,21. Las causas para que no se produzca este paralelismo pueden ser diversas, siendo la falta de tiempo para conciliar la actividad asistencial, con el trabajo intelectual de escribir un artículo original como la posible causa con más peso. Se necesita disponer de tiempo y dedicación específica para consolidar el conocimiento, haciendo hincapié en la necesidad de estructuras que lo faciliten.
Parece oportuno ampliar esta línea de investigación sobre la autoría femenina tanto en reuniones como publicaciones, analizando la posible concordancia o no entre unas y otras, así como sus posibles causas y su evolución a lo largo de los próximos años. También son líneas de investigación futuras los resultados de investigación de las mujeres, además de en el ámbito asistencial, en el universitario.
Somos conscientes de las limitaciones de un estudio realizado en una base de datos de una única sociedad científica, aunque se trata de la sociedad con mayor número de asociados de nuestro país y, con diferencia, la mayor de las sociedades de AP. A pesar de ello, nuestros resultados con varios miles de comunicaciones presentadas a eventos científicos durante 15 años sí pueden contribuir a ofrecer una visión de la situación de la investigación femenina en España.
En la reciente convocatoria del Instituto de Salud Carlos III (ICIII) por primera vez se ha producido el hito de que hay más mujeres investigadoras que hombres. La convocatoria de ayudas a Proyectos de Investigación en Salud (PI), incluida en la Acción Estratégica en Salud (AES) del ISCIII y publicada a finales del año pasado, incluye por primera vez en la historia una mayor participación de mujeres que de hombres, y un mayor porcentaje de proyectos concedidos a mujeres investigadoras IP (investigadora principal). Aunque la AP tiene una relación asimétrica con el hospital en la obtención de financiación en estas convocatorias por diferentes motivos, este hecho puede favorecer que se incorporen un número mayor de mujeres investigadoras del ámbito de la Medicina de Familia22 (Instituto de Salud Carlos III 2022) y se cambie la situación actual en la que el número de médicas de familia investigadoras como investigadoras principales es casi inexistente.
En conclusión, nuestros resultados muestran que la investigación difundida y presentada en los eventos de la semFYC está feminizada, coincidiendo con la feminización de la especialidad de Medicina de Familia. Así mismo, hemos comprobado que las CC. AA. que disponen de estructuras específicas de investigación para la AP son también las que más contribuyen a dicha feminización.